Diariamente nos topamos con personas que actúan de forma muy ruda, no agradecen, no piden por favor las cosas, en definitiva se ve que sus mamás no les enseñaron modales. Es cierto la educación sobre los buenos modales debe empezar en casa a muy temprana edad y va más allá de decir: ¨Por favor¨ y ¨Gracias¨. ¿Qué otros modales deben inculcar en sus hijos? Aquí les damos unos cuantos:
- Pedir las cosas ¨Por favor¨: de verdad parece elemental pero no lo es. Hay muchos niños (igual adultos) que creen que pueden obtener todo lo que quieran, en el momento en el que lo desean y tampoco sienten agradecimiento por la persona que se los proporciona. Imaginan un mundo con adultos que pidan las cosas por favor. Bueno no nos vayamos tan lejos, ¿Saben cuánto ayudaríamos a la maestra de kinder?
Detener la puerta: seguramente les ha pasado que están por cruzar un puerta detrás de alguien y ese alguien la suelta justo en su cara. Es necesario poner el ejemplo y enseñar a los niños a que se pueden detener por unos segundos y sostenerle la puerta a la persona que viene detrás. - Respetar el turno de otros: no hay nada más irritante que ver cómo una persona se salta la fila para comprar primero los boletos del cine, para pagar en el supermercado o en la cafetería. El enseñar a los niños a burlar este orden y no respetar el turno de otros hace que crezcan con la idea de que pueden pasar por encima de quien sea. Evítenlo por favor.
- Dar las Gracias: una de las cosas de las que más se quejan los adultos en un ambiente laboral es que su jefe o jefa no reconoce su trabajo. Lo mismo sucede con las amas de casa, quienes su dilema es la falta de reconocimiento; nadie les agradece su dedicación en el hogar. Deben enseñar a los niños a agradecer la ayuda que reciben, el alimento que se les provee y hasta los regalos en su cumpleaños o navidad. No es nada difícil, si se les pone el ejemplo; si ayudan a bajar las bolsas del super, a poner la mesa, a sacar la basura hay que agradecerles sincera y efusivamente, esto les hará sentir bien y los animará a seguir ayudando. Cuando crezcan recordarán lo bien que se siente que otro agradezca su esfuerzo y harán lo propio.
- Ayudar a quién lo necesita; desde pequeños hay que enseñar a los niños a ofrecer ayuda a quien lo necesita; ya sea un adulto mayor a quien se le cayeron algunas monedas, alivianar la carga a una señora embarazada, impedir que otros molesten al niño nuevo en el salón. Esto es más cuestión de principios y de empatía, hacerles ver a los niños que en las mismas situaciones ellos querrían tener ahí mismo a alguien que les ayudara.
- Pedir perdón: parece sencillo pero es de las más difíciles. Existen personas que simplemente no pueden decir: ¨Lo siento¨. Como madres es importante enseñarle a los niños que está bien equivocarse, que es mejor aceptar los errores y corregirlos, en lugar de tratar de cubrirlo pues al final se empeoran las cosas. Hay que darles la confianza a los niños de que pueden fallar, que no tienen que ser perfectos y que de su humanidad salen las grandes lecciones.
- En la mesa: después de los anteriores esta parece menos importante, pero hay que hacer hincapié en los niños a que usen los cubiertos adecuadamente; no hablar con la boca llena; esperar a que todos tengan su plato para comenzar a comer; preguntar si se puede levantar de la mesa; agradecer a la persona que preparó los alimentos y llevar los platos a la cocina.
Como madres somos responsables de esos niños que en un futuro se convertirán en el jefe, jefa, el esposo(a), padre, madre de otros. ¿Cómo queremos que se relacionen con ellos?